María Carbonero nace en Palma en 1956. Desde temprana edad muestra una profunda inclinación por el dibujo y la pintura, influenciada por su abuelo, el pintor Pedro J. Barceló, reconocido paisajista y retratista, con quien comparte inquietas horas de taller y de quien aprende a dibujar.

Licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona en 1981, tuvo también la oportunidad de conocer a Joan Miró, experiencia significativa en su formación artística. En 1982 realiza su primera exposición individual en la Galería Joaquim Mir de Palma y, junto con otros artistas, funda el Taller i Galeria 6A, donde desarrolla durante décadas una destacada producción gráfica.

Durante la primera mitad de los años 80 explora la abstracción, para iniciar a mediados de la década un giro decisivo hacia el retrato y, de manera esencial, hacia las figuras femeninas, aunque también desarrolla una búsqueda pictórica en torno a temáticas costumbristas como los toros o las gitanas. Su trazo riguroso, grueso y matérico revela una búsqueda de sencillez expresiva que se aleja del academicismo.

El año 1995 marca un punto de inflexión en su carrera con un viaje a Mali. Esta experiencia transformadora se refleja en su obra con la introducción de ocres, motivos de tejidos africanos y huellas étnicas inspiradas en los pueblos que visita. Surgen entonces sus emblemáticos retratos africanos, figuras de gran fuerza visual. En ese viaje reencuentra al también mallorquín Miquel Barceló, con quien comparte momentos de reflexión artística.

«Los rostros que pinta María Carbonero no son estudios de personas, sino paisajes morales llenos de sensibilidad.» Bel Font, 2010

En 2010, a iniciativa del Ministerio de Cultura del Govern de les Illes Balears, se organiza una retrospectiva de su obra en distintas sedes, como el Museu de Menorca y el Casal Solleric de Palma, así como en la Fundación Frax de la Comunitat Valenciana.

Artista esencial en el panorama artístico español contemporáneo, María Carbonero ha expuesto en galerías, museos y ferias internacionales de arte en España, Europa y Asia. Su obra forma parte de numerosas colecciones privadas prestigiosas y de colecciones públicas, entre ellas el museo Es Baluard de Palma, el Museo de Bellas Artes de Álava y la Fundació Sa Nostra.

Su estudio se encuentra en Palma, donde reside en la actualidad.

«Pinto lo que veo, pinto el mundo.» María Carbonero, El País, 1985